El 14 de enero de 2001 se marchaba por sorpresa, sin avisar, en silencio, el matador de toros Julio Robles dejándonos un vacío terrible a todos los que lo conocimos y lo admiramos dentro y fuera del ruedo.
Un año antes tuve el privilegio de hablar con él «En la Intimidad» para Televisión Salamanca.
Es una de las entrevistas que guardo con un cariño más especial.
¡Un honor haberte conocido, maestro!
Mi homenaje. Mi recuerdo.
¡Gracias!