“!Váaaaaalgame, «chacho»! ¡Si no parece el mismo «gachó». ¡»Asín» como te lo digo!” – decía una buena señora en la gasolinera donde he comprado la revista SEMANA esta ídem. Y claro, no pude por menos que acercarme a la mujer, un mismo calco de Omaíta, y analizar la portada de la revista. -“¡Y fíjate qué tatuajes!”, me espetó. “Habrá que verlo en cueros”. Y claro, una carcajada sí que me eché al respecto. La imagen de Kiko Rivera saliendo de la ducha se vino a mi cabeza como una voltereta de sensaciones, por decirlo finamente, porque me niego a reproducir lo que dijo el clon de Omaíta al respecto.
El caso es que es cierto que el hijo de Isabel Pantoja no parece el mismo. Haber perdido 27 kilos, que se dice bien, le ha sentado de maravilla. Pero no sólo es eso. Es que ya no tiene nada que ver con aquella albondiguilla con apariencia de chico malo de suburbio. Y se ha refinado que parece un pijito niño bien. O niño pera, como diría mi madre. Y lo mismo viste un traje mientras bebe un cóctel, que se pone unos castellanos (sin calcetines, por supuesto) Eso sí. Tiene sendos pendientitos que brillan más que el sol en cada una de sus lindas orejitas.
¡Huy qué mono! En vez de Kiko ahora parece Kikín. Esto de la triple paternidad y la pérdida de peso le ha venido fenomenal. Que declare que su hermana Isa no ha ido a ver a su nueva hija… qué más da. Que existen malos rollos… qué nos importa. Lo verdaderamente grande es ver la nueva imagen de este chico. Y para eso no necesitamos ni leer la entrevista. Con ver los santos nos vale.
Raúl González y Mamen Sanz
Y como hemos hablado de clones es imprescindible hablar de uno de los hijos de Raúl González, el futbolista. Resulta que Jorge, que es así como se llama el hijo mayor del actual Adjunto al Director General del Real Madrid, y su mujer, Mamen, tiene 18 añitos y es un verdadero calco de su padre, además de seguir sus pasos y darle al balón divinamente. ¡Qué maja Mamen Sanz! Mira que intentaron en su día meter perros en danza con esta chica! Y les salió el tiro por la culata. No hay mujer más discreta y más alejada de cotilleos y protagonismos varios.
Supuestas estéticas
Mariló, Mariló, Mariló…. ¿pero qué te has hecho, alma cándida? Ya puedes decir que el pelo recogido en una coleta y el maquillaje de ojos ahumados son los culpables de tu cara diferente. Pero no. No lo creemos. Adjunto imagen encontrada en Google gracias a El País.
¡Pardiez! El cambio es notable. Y no seré yo quien diga si está mejor o peor, que a mí me parece una mujer guapísima se ponga como se ponga. Pero vamos, que si se ha hecho algo… ¿qué pierde diciendo la verdad? Si el personal se lo va a agradecer más que si intenta ocultar lo que parece obvio. ¿No has presumido siempre de naturalidad? ¡Albricias! Pues sigue.
Supervivientes y mis predicciones
Esta noche comienza “Supervivientes” y, por supuesto, no voy a perdérmelo. Si aguanto, claro, que últimamente me acuesto como las gallinas. No por puta, si no porque me vence el sueño y me quedo roque en nada. Pero vamos, que así, a primera vista, intuyo que María Lapiedra se va a «arrejuntar» con uno “en cuantis” pueda, por eso del morbo. (Ay Gustavo… con lo que yo te admiraba… y se me ha caído el mito: “encoñao” se dice en mi pueblo; pero encoñao, encoñao que ha perdido la razón. Y el orgullo.)
Pronostico también que Alberto Isla la va a liar parda. Que Maite Zaldívar dará mucho juego. Que María Jesús Ruiz con tal de llamar la atención será capaz de hablar con las piedras y contestarse. Que Francisco nos va a cantar un día sí y otro también. Y que la Mosquera mola porque le importa todo una… (emoticono de mierda). De los demás no hablo porque me da perezaca pero… ¿quién sabe?
¡Oye! Que también me he comprado la revista HOLA. Es que me resultó imprescindible. Es la presentación en sociedad de Alejandra, la hija de Terelu. Y la curiosidad me deslumbró. ¡Qué mona es! ¡Qué flaca! ¡Qué 18 años más bien puestos, hija! ¡Y qué manicura más perfecta! A su edad a mí me salían unos padrastros qué para qué las prisas.
Bueno… natural, lo que se dice natural, no es que aparezca en las fotografías. Pero ¿qué haría usted si fuera nieta e hija de famosos, fuera una lindura y tuviera 18 añitos? Pues posar como si no hubiera mañana. Y si es con un jersey de lana rojo roto, rotito, rotazo… pues perfecto. Si todo le va a quedar bien. Hasta los calcetines que no nos dejan ver sus pies en ningún momento… y eso que HOLA es de mostrar pies sí o sí. Conclusión: “tiene los pies feos”. Es un suponer.
Y no me lio más que usted tendrá mucho que hacer y yo tengo que bañar al perro. ¡Ea!